lunes, 20 de octubre de 2008

La historia de Monolito (1/2)

Desde que mi cápsula espacial cayó en la superficie del planeta Oli, mi vida pasada es una nebulosa en mi memoria. Sin embargo, con el tiempo, parece que empiezo a recordar algo.

Le he pedido a Staboli, que ya empieza a sufrir sus espantosas mutaciones, que me ayude a ilustrar mi historia según la voy recordando. Disculpad las lagunas que pueda haber en mi memoria.

-o-

No sé a qué especie pertenezco, pero creo que soy un babuino. No sé qué edad tengo, pero recuerdo cómo era mi infancia. De lo que sí estoy seguro es de que vivía en las selvas de Uganda, en la Tierra, rodeado de amigos de mi misma especie.

Recuerdo que era feliz. Mi madre cargaba conmigo a todas partes, y me defendía cuando algún horrible mono intentaba atacarme. Los machos dominantes pueden ser muy crueles, y en ocasiones matan a las crías para que las hembras vuelvan a entrar en celo.


Yo me sentía seguro con mi mamá. Ella saltaba conmigo a cuestas de árbol en árbol, de liana en liana, y nunca me pasaba nada. Cogía manzanas y las partía en dos para compartirlas conmigo. Además, era muy lista. Se inventó unas herramientas para fondear arroyos, partir nueces e incluso para extraer termitas de su hormiguero. Recuerdo que al final del día me daba un palito rebosante de ellas y estaban muy ricas.

Un día, escuchamos un estruendo. Todos los babuinos que rondaban por allí salieron escopetados para esconderse. Mi mamá y yo estábamos sobre una rama, y nos miramos a los ojos con la gravedad de que algo no iba bien. En un par de segundos, su mirada se apagó, y cayó al vacío, salpicando una polvareda de hojarasca al llegar al suelo.

Bajé horrorizado, y en ese momento aprendí lo que era la muerte. Mi mamá dejó de ser mi mamá, mientras yo luchaba por despertarla. De pronto, miré hacia arriba y vi a un hombre con un artilugio con tubos de los que salía humo. Me agarró por el cuello y no recuerdo nada más.

6 comentarios:

Irina. dijo...

Pobriñoo, qué carita de pena.

A mí me gustan más los chimpancés pero creo que esta especie la he visto en el zoo.. ¿o no son los del culete rojo?

Anónimo dijo...

Preciosos dibujos (en inglés, nice pictures)
Pe

Iván dijo...

Jo, que historia más triste... Pobre monolito.

Por otro lado, si se me permite decirlo las mutaciones a Staboli le están sentando muy bien.

Un saludo!

Oli dijo...

Com, no todos los monos son rojos como los osos; sólo son como los mondongos. Yo los conozco. ¿Todos son orondos?

Tururú.

Pe, se ve que te creces en el "yes!". Eres el

tiquismiquis... I-

-van, las malvadas balas ámbar tapan máscaras al matar almas.


OLI I7O

Malva da Pao dijo...

muy original tu comentario....
me gusta el mono, la historia se recuerda a la de bambi, pero a ella no la trincaba el cazador no?

See u tomorrow??

Anónimo dijo...

Me gusta la historia, y la candidez de monolito me recuerda al Principito. Precioso.